martes, 12 de abril de 2011

La Conspiración IV

He considerado prudente iniciar la presente entrega, no sin antes aclarar que los artículos que estoy compartiendo con los lectores de las Verdades de Miguel, están fundamentados  en experiencias propias, que acompaño con  informaciones de prensa, que por su relación con los temas tratados, he utilizado como referencia documental. Ello, con el ánimo de contribuir a escribir aunque sea una pequeña parte de nuestra reciente historia, de la que por la experiencia vivida en los cargos que ocupé a lo largo de mis treinta años de servicio en la Fuerza Armada Nacional, me hacen considerarme parte de ella y no es para menos, porqué en la Cuarta República fui objeto de seguimiento y de investigaciones por señalamientos sobre mis infundadas relaciones con “Bandera Roja”, aca en Venezuela  y con la “ETA”, en el  Reino de España, las que niego como siempre he negado, y asimismo por haber visitado al General  Marcos Evangelista Pérez Jiménez, en su residencia ubicada en la Urbanización  La Moraleja, Madrid, mientras realizaba el Curso de Estado Mayor en el Reino de España.  Lo que aunque jamás negué, por poco me cuesta mi ascenso al grado de Coronel y con ello sacarme del juego...Todo por considerárseme  integrante del grupo de los COMACATES (Comandantes, Mayores, Capitanes y Tenientes). No fui el único y a lo mejor existen otros compañeros de armas que pasaron por peores situaciones que las por mi vividas, pero no soy quien para contarlas. No todo quedó en la cuarta, porque por los cargos que ocupé  al inicio de la Quinta República, en el área de inteligencia (considerados ingratos), tal como se los he comentado en los artículos anteriores, por ubicarme en el ojo del huracán, no fueron para nada alentadores, amén de haberme permitido la oportunidad de estar en el  lugar y el  momento oportuno,  y con ello la oportunidad de ser participe de los eventos que a través de mis artículos estoy compartiendo con ustedes, convencido de que: ¡Sin lugar a dudas, son parte de la historia  contemporánea! Siendo muy cuidadoso de no revelar informaciones cuya naturaleza podrían ubicarlas en la categoría de “Confidencial”.

Retomando la temática con la que finalizamos la anterior entrega, paso a informarles que durante la segunda fase de mi estadía en la DIM,  que se  correspondió con la legalización de mi designación como Sub Director, en esta oportunidad, bajo las ordenes del nuevo Director, General de Brigada PEDRO ALI BARRIOS ZURITA, fueron muy pocos los cambios que se suscitaron en nuestras relaciones, porque si bien es cierto que éste efectuó algunos cambios positivos en la línea de acción a seguir, no es menos cierto,  que a pesar de la inexistencia de motivos, persistió el celo hacia mis supuestas relaciones con Miraflores, para lo que no faltaba la pregunta: ¿Que hacías anoche en Miraflores?.  Era casi un tema común en nuestras conversaciones, cuando la idea era unir esfuerzos en función de un solo objetivo, máxime cuando estaba crudita la nefasta experiencia que había introducido en nuestro ambiente organizacional, la publicación del supuesto “Plan Antena”. En mi hogar me enseñaron a no ir a donde no me invitaban y en la vida militar,  que: “El militar ni se ofrece, ni se niega”. De ahí se deduce que si no era llamado, no tenía nada que buscar a Miraflores.
Ocho meses más sería el tiempo de mi permanencia en el cargo ya que en el mes de Abril de 2001, se produjo mí salida definitiva, esta vez con designación para el cargo de Comandante de la 22 Brigada de Infantería con sede en Mérida y jurisdicción en Los Estados Mérida, Trujillo y parte de Táchira. Lo triste es que por instrucciones del nuevo Director, General de Brigada Rafael Martínez Morales, en esta oportunidad, hasta la cerradura de la puerta de mi oficina, fue cambiada antes que se materializara la entrega de mi cargo. Después de esto, recuerdo haberle  dicho al General Lucas Rincón: “Mi General, dígale, por favor al señor Presidente, que si ya no me tiene confianza, que no me mande para Mérida, porque prefiero irme de baja”. A lo que éste me respondió diciéndome que me quedara tranquilo porque el Presidente lo que quería era pretejerme  No obstante, no se hicieron esperar las informaciones de prensa como las publicadas  en EL Diario Tal Cual del día martes  10 de Abril de 2001, en las que en la columna “Por mi madre”, reseñaba: “Barrios Zurita, bien lejos. El recien removido director general de la DIM (Dirección de Inteligencia Militar), general de brigada Pedro Alí Barrios Zurita, partirá pronto como agregado militar ante la ONU, en Nueva York, es el consuelo por no  haber sido elevado al grado de general de división. La pregunta es ¿por qué, si es o era protegido de Lucas Rincón?. Hay gente que dice con la mayor desfachatez: “¡Guá por inepto!”. Al parecer, la ineptitud fue el chorro de agua  que derramo el vaso de la paciencia del comandante. Se citan los casos de Richard Boulton y de los 240 fusiles del arsenal de armamento que se desaparecieron como dos gotas del mencionado chorro”. Y por otra parte:” La otra hojilla: Pero no solo se volaron a Barrios Zurita. La otra hojilla, la que repasa, se voló también al general Wilmer Moreno, quien era  sub director. Al parecer Moreno se había dedicado a hacer correr la bola de una supuesta conspiración contra  el Presidente en la Guardia Nacional hasta que lo descubrieron en el tejemaneje. “¿Cómo va a haber conspiración sin conspiradores?”,  preguntaba Chávez desesperado. Inteligencia descubrió el origen de la bola y hasta allí llegó el hombre. A Moreno lo sustituye el comandante del regimiento de  Guardia de Honor”, coronel Velásquez”. La verdad es que hasta allí llegué en el cumplimiento de mis funciones en el área de inteligencia, por lo que les confieso, que si detrás de ello, se escondían agentes ajenos a los que les correspondía la toma de decisiones. ¡Se salieron con la suya!. No obstante, aunque a partir de ese entonces, no era mi área específica, por  los compromisos adquiridos no podía dejar a un lado todo el trabajo realizado, con la salvedad  de que ya no formaba parte del ente rector.
 Si alguno de los lectores me pregunta. ¿Es que usted, elaboró el supuesto Plan antena?, o me pregunta sobre cualquier tópico de naturaleza clasificada. Mi respuesta será la misma que en una oportunidad suministre en la Fiscalía del Ministerio Público, cuando al interrogárseme sobre si tenía conocimiento de la realización por parte de la DIM, de alguna investigación sobre la participación de miembros del Frente Institucional Militar en actividades desestabilizadoras  (por una supuesta solicitud des estos), le conteste al funcionario, que ya no formaba parte de la directiva de dicho organismo de inteligencia y  en tal sentido ni estaba autorizado, ni era la persona más indicada para suministrar ese tipo de información. No obstante,  como parte del trabajo que nos ocupa, con el que trato de demostrar las obstáculos que en materia de desestabilización ha tenido que sortear el gobierno liderizado por nuestro comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías y por ser parte de una experiencia personal, más que del servicio, voy a compartir con ustedes dos eventos que a mi entender son hechos de nuestra historia reciente, a saber:

Uno de ellos,  fue el  publicado en el mes de Abril de 2001 por el vespertino El Mundo, en el qué a grandes titulares se señalaba que: “El diputado oficialista Pedro Carreño, aseguró que Montesinos había sido asesinado en el Perú” Al respecto,  les cuento que en momentos en que me encontraba hablando con el Ingeniero Fernán Altuve Febres, hizo acto de presencia el diputado de la Asamblea Nacional, Capitan Pedro Carreño, a quien me unía una gran amistad, producto de que con el grado de Capitán en el año 1986, fui su comandante de compañía en el Batallón de Cazadores Cnel. Juan José Rondón, cuya sede estaba en Caripito, estado Monagas, siendo éste, subteniente recién egresado de la Academia Militar de Venezuela. Lo cierto del caso es que, el para entonces diputado Pedro Carreño, me pregunta: ¿Mi general que sabe usted de Montesinos?; a lo que sin vacilaciones y sin permitirme realizar comentario alguno, el Ingeniero Altuve Febres, le  hecha el cuento de que esta muerto en el Perú. Cual sería mi sorpresa cuando en horas de la tarde, dicha información aparece titulada en el  vespertino El Mundo en los términos ya expresados. Si tenían una versión distinta, olvídenla, porque  esta es la verdadera. 

 El otro episodio, se corresponde con la introducción de nuestra industria petrolera en el escenario político desestabilizador, que por considerarlo digno de reflexión y de seguimiento para nuestros análisis, no podía dejar de mencionar y es el que se corresponde con las informaciones que a través de artículos de prensa realizan los periodistas a saber:
El del Periodista Gastón Guisantes, quien en el vespertino El Mundo, del día martes 06 de Marzo de 2001 (Enjuiciar a Giusti), señala: “Si en Venezuela se aplicase la ley, Luís Giusti, tan pronto asuma su función como asesor del Presidente George Bush en materia petrolera, sería enjuiciado por traición a la patria, por comportamiento deshonesto y desleal.”. “Si señor, traición, conspiración, contra los superiores interese del país y entrega de información secreta, privilegiada y estratégica a un gobierno extranjero que es antagonista y contrario a Venezuela en el ámbito petrolero…,como decía mi abuela hasta la vergüenza se perdió”.  El del Periodista  Kico Batista, que en su columna FEELING, del 16 de Marzo de 2001, del Diario El Nacional, pagina B/5 , bajo el titulo “Petróleo a chorros”, luego de realizar algunos comentarios sobre los postulados para nueva directiva que en PDVSA, acompañaría al general Guicaipuro Lameda Montero en su condición de Presidente de la misma, señala que: “El apoliticismo no es más que una estrategia para el control de PDVSA”.  Estos comentarios no eran para menos porque si bien, los  funcionarios postulados y posteriormente designados, poseían una gran experiencia y preparación en materia petrolera, también había que considerar su inclinación hacia los partidos de la oposición (conexión Lagoven y conexión partido de oposición) y considerar además, quienes de ellos habrían formado parte del clan que en el pasado había favorecido la política de privatización de PDVSA, y en ese  mismo orden de ideas, en el que prácticamente como anillo al dedo, para concluir con las referencias documentales periodísticas, les presentaré el correspondiente al Periodista Leocenis García quien en  articulo publicado en la pagina WebSoberanía” ( www.soberania.org ) de fecha 15 de Enero de 2004, bajo el titulo ¿Y después?, entre otras cosas señala: ”Los organismos de inteligencia estatales comenzaron a detectar las actividades de Lameda, entre las cuales destacan sus reuniones con Luís Giusti en Washington, con Henry Kissinger en Nueva York, con el ex presidente Carlos Andrés Pérez en Miami, por supuesto con el conglomerado empresarial y de medios de comunicación, así como con el llamado Frente Institucional Militar”. “(Stella Calloni  /  La Jornada 25/09/02). Sin embargo, el general Lameda ya había dejado las vías expeditas para el golpe de PDVSA. Por eso en muestra de agradecimiento Carmona, después de auto juramentarse lo nombra “nuevamente” Presidente de PDVSA”.  Si leemos detalladamente cada uno de estos artículos y los relacionamos entre sí, lo más probable es que el resultado sea escuchar la pronunciación de la frase: ¡ Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.!, más aún, al ser conocido por todos, el ofrecimiento que el fallido gobierno de Carmona le hiciera al general Guaicaipuro Lameda, para recibir la Presidencia de PDVSA., con lo que  regresaría a dirigir la industria petrolera nacional, el mismo personaje que al recibir por primera vez la presidencia de dicha industria había expresado: “La politica partidista esta execrada (sic) de esta Corporación  mientras yo sea su Presidente”  Las tareas de inteligencia, imponen la consideración de todas las informaciones, por lo que todas, sin excepción deben ser procesadas con igual interés. O sea que para la fecha de la entrega de mi cargo, las informaciones de prensa, ya no solo indicaban la participación de elementos del sector militar a través del supuesto  Plan Antena, en actividades desestabilizadoras, sino que para la fecha, salían a la palestra elementos ligados a  nuestra primera industria nacional. Lo que hacía suponer que el panorama político del país, tendía a redimensionarse. 
A partir del mes de Mayo de 2001, dejé de formar parte del sistema de inteligencia, llevando en mente el compromiso asumido en la Casa Fuerte de Barcelona, cuando en reflexión a viva voz, se nos dejo escuchar la frase:          ¡ Salve, oh patria mía. Tus hijos en armas no duermen. Están atentos al palpitar de su pueblo!, partiendo bajo ese mismo compromiso hacía  mi nuevo destino en el Comando de la 22 Brigada de Infantería con sede en la Ciudad de Mérida, en donde en Junio de 2001, recibí el estandarte de la unidad, de manos del General de División (Ej) Jorge Luís García Carneiro, quien en su condición de Comandante de la Segunda División de Infantería, a partir de ese entonces, sería mi comandante natural en la línea de mando hacia el Comandante General del Ejército. ¡A ponerse las alpargatas que lo que viene es joropo!                                                                               

                                            Bolivarianamente
                           GB (EJNB) WILMER ANTONIO MORENO
                                     Wilmemoreno@hotmail.com    

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